MAPA COLABORATIVO DISEÑADO POR LOS CHICOS DE 4TO 1RA - AÑO 2016
Vamos a trabajar en torno a una pregunta: ¿por qué la República Argentina reclama la soberanía de las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes?
Los argumentos históricos
Empecemos por los argumentos históricos. El principal argumento puede resumirse así: la República Argentina afirma que las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes son argentinos porque, tras la Revolución de Mayo (1810) y la Declaración de la Independencia (1816), estos territorios pasaron a ser considerados como “territorios heredados” de la Corona española.
Este argumento se sostiene en dos cuestiones fundamentales:
- Las islas Malvinas estuvieron hasta el proceso político desencadenado por la Revolución de Mayo bajo jurisdicción de la Corona española. A partir de la Independencia, los territorios que pertenecían a la Corona española pasaron a formar parte de las Provincias Unidas en razón del principio de derecho internacional bajo el cual se conformaron los nuevas países sudamericanos: el uti possidetis iure. ¿Qué establecía? Que las nuevas demarcaciones políticas debían seguir el curso de las previas, por lo que las nuevas naciones descolonizadas heredaban las demarcaciones territoriales establecidas en la etapa colonial.
- Distintos gobiernos surgidos del proceso revolucionario ejercieron sobre las islas Malvinas diversos actos de soberanía que tuvieron consecuencias políticas, jurídicas, administrativas y económicas. Este proceso se vio interrumpido en 1833 cuando los británicos tomaron las islas Malvinas de manera ilegítima y haciendo uso de la fuerza desalojaron a la población argentina.
En virtud de estos argumentos históricos, la República Argentina concluye que la ocupación británica de las islas Malvinas es ilegítima, puesto que ha sido fruto de un acto de fuerza que jamás recibió reconocimiento por parte del Estado argentino. Ese acto de fuerza, y las consecuencias que se siguen de él hasta la actualidad, representa para la República Argentina un acto de violación de su integridad territorial, provocando la existencia de un encave colonial en el Atlántico Sur en pleno siglo XXI.
Línea de tiempo: Del descubrimiento a la usurpación de las Malvinas (1520-1833)
En esta línea de tiempo relevamos algunos de los hechos históricos destacados que se vinculan con el “argumento histórico”. Los invitamos a imaginar qué cinco o seis acontecimientos de esta línea de tiempo podrían elegirse para trabajar en el aula.
1494. El Tratado de Tordesillas. Este Tratado asigna a España el sector occidental del “Nuevo Mundo”, dentro del cual se encuentran las islas Malvinas.
1520. Descubrimiento de las Islas Malvinas. Las islas son descubiertas por integrantes de la expedición comandada por Magallanes.
1713. Paz de Utrecht. Por medio de este Tratado se reafirma el derecho de la Corona Española a los territorios de América del Sur y la exclusividad en la navegación del Atlántico Sur. Gran Bretaña, que suscribió el Tratado, reconocía así los derechos españoles sobre Malvinas.
1764. Expedicionarios franceses se instalan en el archipiélago “Îles Malouines”. El 5 de abril de 1764, expedicionarios franceses al mando del conde Louis Antoine de Bougainville, forman la colonia pesquera y foquera de “Port Saint Louis” en la Isla Soledad y toman posesión de las islas en nombre del rey Luis XV de Francia. El nombre Îles Malouines data de principio del S XVIII y tenía que ver con la procedencia de los expedicionarios que las frecuentaban, procedentes del puerto francés Saint Maló. Cuando apenas tres años después los franceses se retiren de las islas a pedido de la Corona española, las islas serán denominadas “islas Malvinas”, una castellanización del nombre con que los franceses denominaban a las islas.
1767. Primer Gobernador español de las Islas Malvinas. España se opuso a la ocupación de las islas por parte de la Corona francesa y obtuvo de parte de Francia el reconocimiento del derecho español a las islas. Por ese motivo, en 1767, los franceses entregaron la plaza y desde entonces hubo un gobernador español en las islas; residente en ellas y dependiente de Buenos Aires. El primero fue Felipe Ruiz Puente (1767-1773), dentro de una serie de 32 gobernaciones ejercidas por 19 gobernadores hasta el año 1811.
1774. Los ingleses reconocen la soberanía española y se retiran de Port Egmont. En 1771,España expulsó a británicos que, en el marco de un renovado interés de expansión colonialista, habían ocupado ilegítimamente una de las islas que conforman el archipiélago de las islas unos años antes (enero de 1765). Desde entonces las autoridades españolas continuaron ejerciendo su jurisdicción y control sobre la totalidad del archipiélago hasta la revolución de Mayo.
1806 y 1807. Las invasiones inglesas. Con el fin de anexar el Virreinato del Río de la Plata a la Corona Británica, el 24 de junio de 1806 el capitán Beresford al mando de una fuerza de 1500 hombres desembarcó en el puerto de Ensenada. La plaza fue recuperada por el accionar de tropas provenientes de la Banda Oriental al mando de Santiago Liniers y por una férrea resistencia de milicias urbanas conformadas en esos mismos días por los porteños. El 4 de julio de 1807, Whitelocke al mando de 10000 hombres, desembarcó en el puerto de Ensenada y avanzó sin oposición hasta la Plaza Miserere. Sin embargo, los británicos fueron combatidos por más de 9000 milicianos organizados por Martín de Álzaga y con la participación de un amplio abanico social que combatía en cada esquina arrojando agua y aceite hirviendo a la fuerza de ocupación. Tras múltiples enfrentamientos callejeros que provocaron numerosas bajas británicas, el 7 de julio Whitelocke aceptó la capitulación ofrecida para Liniers, que incluía la rendición británica en Montevideo en un plazo de dos meses.
1810. Revolución de Mayo. Con la Revolución de Mayo y la Declaración de la Independencia en 1816, las islas Malvinas pasan a pertenecer a las Provincias Unidas del Río de la Plata como territorio heredado de la Corona Española según el utis possidetis iuri. A lo largo de esta década y la siguiente, los primeros gobiernos patrios efectuarán diversos actos administrativos y de soberanía en las islas.
1820. David Jewett toma posesión de Malvinas en nombre de las Provincias Unidas. David Jewett, coronel de la Marina argentina, toma posesión de las Islas Malvinas en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Siguiendo órdenes de sus superiores, prohibió la caza y pesca en la jurisdicción de las islas a los buques extranjeros. La toma de posesión aconteció en un acto público en Puerto Soledad al que asistieron loberos y balleneros de varias nacionalidades, entre ellos estadounidenses y británicos, que recalaban en las islas en el desarrollo de sus faenas. La noticia fue publicada en medios de los Estados Unidos y del Reino Unido, sin que recibiera comentario oficial alguno en esos países.
1824. Es designado comandante militar de las Islas Malvinas durante seis meses Pablo Areguatí. Era guaraní y había nacido en la aldea San Miguel Arcángel, fundada en tiempos del Virreinato del Río de la Plata por misioneros jesuitas en territorio que ahora pertenece a Río Grande do Sul, en Brasil.
1825. Gran Bretaña reconoce a las Provincias Unidas sin plantear diferendo alguno por las islas Malvinas. Gran Bretaña y las Provincias Unidas del Río de la Plata acuerdan un Tratado de Amistad, Comercio y Navegación que supone el reconocimiento de la independencia argentina por parte del Reino Unido. En el Tratado Gran Bretaña no expresa ninguna objeción por la toma de posesión argentina en las islas Malvinas.
1829. Creación de la Comandancia Política y Militar Malvinas.El 10 de junio de este año el gobierno argentino promulgó un decreto creando la Comandancia Política y Militar de las Malvinas. Asimismo, designó a Luis María Vernet como Comandante de las islas. Después de haber mantenido silencio por más de medio siglo en el curso del cual se habían sucedido sin oposición administraciones españolas y argentinas en las islas Malvinas, en noviembre de 1829 el Reino Unido protestó dicho decreto, en el marco de un renacimiento de su interés estratégico en el Atlántico Sur.
1831. La antesala de la usurpación: el buque norteamericano Lexington arrasa Puerto Soledad. A fines de 1831 un buque de guerra de los Estados Unidos, la Lexington al mando de Silas Duncan, arrasó Puerto Soledad en represalia por la captura de buques loberos de esa nacionalidad que habían sido hallados en infracción a la legislación de pesca por las autoridades argentinas. El gobierno argentino inició de inmediato las gestiones para obtener reparación de los Estados Unidos y a la vez envió la goleta Sarandí de la Armada para restablecer el orden en las islas, que había sido quebrado por la irrupción de la nave estadounidense. La intrusión de la Lexington incluyó la detención de dos colaboradores de Vernet, el saqueo de casas y la toma de seis prisioneros argentinos. Los residentes argentinos que no huyeron al interior de la isla fueron molidos a golpes.
1833. La usurpación británica. El 3 de enero de 1833, como parte de una política expansionista y colonialista, Inglaterra usurpó las islas Malvinas y expulsó a las autoridades argentinas. Ello ocurrió cuando la corbeta Clío de la Marina Real británica al mando de John Oslow, apoyada por otro buque de guerra que se encontraba en las cercanías, amenazó con el uso de fuerza superior y exigió la rendición y entrega de la plaza. Tras la expulsión de las autoridades argentinas, el comandante de la nave británica dejó a uno de los pobladores de Puerto Soledad a cargo del pabellón británico y zarpó de regreso a su base. La República Argentina reclamó ante Gran Bretaña de manera inmediata y no ha dejado de hacerlo hasta nuestros días, tanto en las relaciones bilaterales como en diversos foros multilaterales.
Una década después, el intelectual británico Mr. P. Grimbolt justificará la usurpación en la famosaRevista de Ambos mundos en estos términos: “Por su posición geográfica y el número infinito de sus puertos, las islas de Falkland parecen ser destinadas por la naturaleza a servir de escala a los buques que navegan los mares Australes o doblan el Cabo de Hornos. Tan grandes ventajas no podían escapársele a la penetración de los hombres de Estado de Inglaterra, y nada hay que extrañar que hayan pensado en asegurar su posesión: por el contrario, es de admirar que no lo hayan verificado antes”.
En esta línea de tiempo relevamos algunos de los hechos históricos destacados que se vinculan con el “argumento histórico”. Los invitamos a imaginar qué cinco o seis acontecimientos de esta línea de tiempo podrían elegirse para trabajar en el aula.
1494. El Tratado de Tordesillas. Este Tratado asigna a España el sector occidental del “Nuevo Mundo”, dentro del cual se encuentran las islas Malvinas.
1520. Descubrimiento de las Islas Malvinas. Las islas son descubiertas por integrantes de la expedición comandada por Magallanes.
1713. Paz de Utrecht. Por medio de este Tratado se reafirma el derecho de la Corona Española a los territorios de América del Sur y la exclusividad en la navegación del Atlántico Sur. Gran Bretaña, que suscribió el Tratado, reconocía así los derechos españoles sobre Malvinas.
1764. Expedicionarios franceses se instalan en el archipiélago “Îles Malouines”. El 5 de abril de 1764, expedicionarios franceses al mando del conde Louis Antoine de Bougainville, forman la colonia pesquera y foquera de “Port Saint Louis” en la Isla Soledad y toman posesión de las islas en nombre del rey Luis XV de Francia. El nombre Îles Malouines data de principio del S XVIII y tenía que ver con la procedencia de los expedicionarios que las frecuentaban, procedentes del puerto francés Saint Maló. Cuando apenas tres años después los franceses se retiren de las islas a pedido de la Corona española, las islas serán denominadas “islas Malvinas”, una castellanización del nombre con que los franceses denominaban a las islas.
1767. Primer Gobernador español de las Islas Malvinas. España se opuso a la ocupación de las islas por parte de la Corona francesa y obtuvo de parte de Francia el reconocimiento del derecho español a las islas. Por ese motivo, en 1767, los franceses entregaron la plaza y desde entonces hubo un gobernador español en las islas; residente en ellas y dependiente de Buenos Aires. El primero fue Felipe Ruiz Puente (1767-1773), dentro de una serie de 32 gobernaciones ejercidas por 19 gobernadores hasta el año 1811.
1774. Los ingleses reconocen la soberanía española y se retiran de Port Egmont. En 1771,España expulsó a británicos que, en el marco de un renovado interés de expansión colonialista, habían ocupado ilegítimamente una de las islas que conforman el archipiélago de las islas unos años antes (enero de 1765). Desde entonces las autoridades españolas continuaron ejerciendo su jurisdicción y control sobre la totalidad del archipiélago hasta la revolución de Mayo.
1806 y 1807. Las invasiones inglesas. Con el fin de anexar el Virreinato del Río de la Plata a la Corona Británica, el 24 de junio de 1806 el capitán Beresford al mando de una fuerza de 1500 hombres desembarcó en el puerto de Ensenada. La plaza fue recuperada por el accionar de tropas provenientes de la Banda Oriental al mando de Santiago Liniers y por una férrea resistencia de milicias urbanas conformadas en esos mismos días por los porteños. El 4 de julio de 1807, Whitelocke al mando de 10000 hombres, desembarcó en el puerto de Ensenada y avanzó sin oposición hasta la Plaza Miserere. Sin embargo, los británicos fueron combatidos por más de 9000 milicianos organizados por Martín de Álzaga y con la participación de un amplio abanico social que combatía en cada esquina arrojando agua y aceite hirviendo a la fuerza de ocupación. Tras múltiples enfrentamientos callejeros que provocaron numerosas bajas británicas, el 7 de julio Whitelocke aceptó la capitulación ofrecida para Liniers, que incluía la rendición británica en Montevideo en un plazo de dos meses.
1810. Revolución de Mayo. Con la Revolución de Mayo y la Declaración de la Independencia en 1816, las islas Malvinas pasan a pertenecer a las Provincias Unidas del Río de la Plata como territorio heredado de la Corona Española según el utis possidetis iuri. A lo largo de esta década y la siguiente, los primeros gobiernos patrios efectuarán diversos actos administrativos y de soberanía en las islas.
1820. David Jewett toma posesión de Malvinas en nombre de las Provincias Unidas. David Jewett, coronel de la Marina argentina, toma posesión de las Islas Malvinas en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Siguiendo órdenes de sus superiores, prohibió la caza y pesca en la jurisdicción de las islas a los buques extranjeros. La toma de posesión aconteció en un acto público en Puerto Soledad al que asistieron loberos y balleneros de varias nacionalidades, entre ellos estadounidenses y británicos, que recalaban en las islas en el desarrollo de sus faenas. La noticia fue publicada en medios de los Estados Unidos y del Reino Unido, sin que recibiera comentario oficial alguno en esos países.
1824. Es designado comandante militar de las Islas Malvinas durante seis meses Pablo Areguatí. Era guaraní y había nacido en la aldea San Miguel Arcángel, fundada en tiempos del Virreinato del Río de la Plata por misioneros jesuitas en territorio que ahora pertenece a Río Grande do Sul, en Brasil.
1825. Gran Bretaña reconoce a las Provincias Unidas sin plantear diferendo alguno por las islas Malvinas. Gran Bretaña y las Provincias Unidas del Río de la Plata acuerdan un Tratado de Amistad, Comercio y Navegación que supone el reconocimiento de la independencia argentina por parte del Reino Unido. En el Tratado Gran Bretaña no expresa ninguna objeción por la toma de posesión argentina en las islas Malvinas.
1829. Creación de la Comandancia Política y Militar Malvinas.El 10 de junio de este año el gobierno argentino promulgó un decreto creando la Comandancia Política y Militar de las Malvinas. Asimismo, designó a Luis María Vernet como Comandante de las islas. Después de haber mantenido silencio por más de medio siglo en el curso del cual se habían sucedido sin oposición administraciones españolas y argentinas en las islas Malvinas, en noviembre de 1829 el Reino Unido protestó dicho decreto, en el marco de un renacimiento de su interés estratégico en el Atlántico Sur.
1831. La antesala de la usurpación: el buque norteamericano Lexington arrasa Puerto Soledad. A fines de 1831 un buque de guerra de los Estados Unidos, la Lexington al mando de Silas Duncan, arrasó Puerto Soledad en represalia por la captura de buques loberos de esa nacionalidad que habían sido hallados en infracción a la legislación de pesca por las autoridades argentinas. El gobierno argentino inició de inmediato las gestiones para obtener reparación de los Estados Unidos y a la vez envió la goleta Sarandí de la Armada para restablecer el orden en las islas, que había sido quebrado por la irrupción de la nave estadounidense. La intrusión de la Lexington incluyó la detención de dos colaboradores de Vernet, el saqueo de casas y la toma de seis prisioneros argentinos. Los residentes argentinos que no huyeron al interior de la isla fueron molidos a golpes.
1833. La usurpación británica. El 3 de enero de 1833, como parte de una política expansionista y colonialista, Inglaterra usurpó las islas Malvinas y expulsó a las autoridades argentinas. Ello ocurrió cuando la corbeta Clío de la Marina Real británica al mando de John Oslow, apoyada por otro buque de guerra que se encontraba en las cercanías, amenazó con el uso de fuerza superior y exigió la rendición y entrega de la plaza. Tras la expulsión de las autoridades argentinas, el comandante de la nave británica dejó a uno de los pobladores de Puerto Soledad a cargo del pabellón británico y zarpó de regreso a su base. La República Argentina reclamó ante Gran Bretaña de manera inmediata y no ha dejado de hacerlo hasta nuestros días, tanto en las relaciones bilaterales como en diversos foros multilaterales.
Una década después, el intelectual británico Mr. P. Grimbolt justificará la usurpación en la famosaRevista de Ambos mundos en estos términos: “Por su posición geográfica y el número infinito de sus puertos, las islas de Falkland parecen ser destinadas por la naturaleza a servir de escala a los buques que navegan los mares Australes o doblan el Cabo de Hornos. Tan grandes ventajas no podían escapársele a la penetración de los hombres de Estado de Inglaterra, y nada hay que extrañar que hayan pensado en asegurar su posesión: por el contrario, es de admirar que no lo hayan verificado antes”.
Los argumentos geográficos
Además de las razones históricas, la República Argentina invoca también razones de índole geográficas para sostener su reclamo.
En el año 1964 José María Ruda, como representante argentino ante el III Subcomité de Descolonización de Naciones Unidas, brindó un discurso que después se volvió conocido como el “alegato Ruda”. Los invitamos a leer un fragmento y a consultarlo entero si están interesados:
“El futuro de estas Islas, separadas de la República Argentina, está fuera de toda lógica y realidad. Geográficamente, se encuentran cerca de nuestras costas patagónicas, gozan de su mismo clima y tienen una economía similar a nuestro sur. Se encuentran enclavadas en plena plataforma continental, que por el Derecho Internacional, después de las Convenciones de Ginebra de 1958, pertenece al Estado costero de pleno derecho”.
Como puede apreciarse, las razones geográficas que sustentan el reclamo argentino se basan en estos dos aspectos:
- En el notorio contraste entre la proximidad de las islas con la costa patagónica argentina y la enorme distancia geográfica que separa a las Malvinas del Reino Unido (casi 12.700 kilómetros).
- Porque las islas forman parte de la plataforma continental argentina, tanto si se toman en cuenta los parámetros definidos por la Convención de Ginebra de 1958 (que es la que menciona Ruda y que estipulaba a las 200 millas marinas como criterio de delimitación de la plataforma continental) como así también si se tiene en cuenta la “Convención de las Naciones Unidas sobre los derechos del Mar” (COVEMAR) acordada en el año 1982, cuyo artículo 76 permite extender de 200 a 350 millas la plataforma continental de un Estado en aquellos casos en los que el Estado interesado en hacerlo pueda probar la extensión natural de su territorio más allá de la antigua delimitación y hasta el límite exterior de su plataforma continental.
Una manera de trabajar en el aula con los argumentos geográficos es utilizando el mapa bicontinental, que permite observar la totalidad del territorio continental, insular y antártico. Esto nos ayuda a dimensionar la importancia estratégica de las tierras usurpadas. En esta representación se distingue de forma clara que las Islas Malvinas y los archipiélagos de Georgias del Sur y Sándwich del Sur integran la provincia argentina de Tierra del Fuego, Antártida e Islas el Atlántico Sur, cuya capital es Ushuaia. Para constatar qué nueva representación construye el mapa no hay más que doblarlo a la mitad: en el medio de la Argentina ya no quedan La Pampa, Córdoba o Mendoza sino Tierra del Fuego, lo que permite visualizar la continuidad geológica y geográfica con la Antártida.
Vale aclarar que el mapa bicontinental fue confeccionado por el Instituto Geográfico Nacional. Desde 2010 es el que se utiliza en el sistema educativo. No se trata de un mapa nuevo, ya que se había empleado en la década del cuarenta, lo novedoso es que ahora está definido como cartografía oficial.
En síntesis, ya sea por la proximidad geográfica, ya sea por los tratados que delimitan los mares nacionales -tanto si se toma como referencia el Tratado de Ginebra (1958) como la CONVEMAR (1982)-, las islas Malvinas y otras islas del Atlántico Sur, más los espacios marítimos circundantes, pertenecen a la plataforma continental argentina.
Recordemos el concepto de PLATAFORMA CONTINENTAL en el link de COPLA (ENLACES ÚTILES)
Los argumentos jurídicos y políticos: Malvinas como un caso de “descolonización”
Ahora es el momento de introducir un nuevo argumento, el “jurídico-político”, que tiene que ver con el modo en que la República Argentina ejerció su reclamo de soberanía desde 1833, el año, como sabemos, de la usurpación británica. Bajo esta dimensión, lo que hay que subrayar es que desde ese entonces, la República Argentina nunca dejó de reclamar la soberanía de las islas, sea en el plano unilateral, en el bilateral (al Reino Unido) y ante organismos multilaterales (como por ejemplo, Naciones Unidas). Este punto es importante, porque permite desmentir la posibilidad de ampararse en lo que se denomina “el derecho de adquisición por prescripción”, esto es, la ocupación efectiva sin protesta. En determinados contextos históricos el Reino Unido, pretendió avalar su presencia ilegítima en Malvinas apelando a este principio.
Vayamos ahora viendo punto por punto lo que los entrevistados explican en el video que recién compartimos. Empecemos por lo sucedido en los años sesenta del siglo XX, cuando Naciones Unidas se hizo eco de este conflicto. En este marco, la diplomacia argentina consiguió que la cuestión Malvinas sea inscripta como un problema a resolver en el contexto del amplio proceso de descolonización abierto por la independencia de los países asiáticos y africanos. Veamos de qué modo Malvinas fue incorporado por Naciones Unidas como un territorio a “descolonizar”.
En diciembre de 1960 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Resolución 1514 (XV), titulada como la “Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales”. Allí proclamó “la necesidad de poner fin, rápida e incondicionalmente, al colonialismo en todas sus formas y manifestaciones”. Para esto consagró dos principios fundamentales que debían guiar la descolonización:
-el principio de libre determinación;
- el principio de integridad territorial.
El principio de libre determinación es aquel que confiere a los pueblos el derecho de instituir sus propios gobiernos; y el principio de integridad territorial encomienda que ningún Estado se constituya violando el territorio de un Estado preexistente.
En este contexto, Gran Bretaña pretendía que para la cuestión Malvinas se aplique el principio de la libre determinación; la República Argentina, en cambio, rechazó este planteo y sostuvo que en la cuestión Malvinas debía primar el principio de la integridad territorial. ¿Por qué? Básicamente, porque el caso de las islas Malvinas posee un carácter específico dentro de los procesos de descolonización. ¿Cuál es su especificidad? Que a diferencia de las naciones asiáticas y africanas que luchaban por la descolonización durante el siglo XX,en Malvinas no hay un pueblo subyugado por un poder colonial, sino que lo que ha sido colonizado es el territorio argentino mismo, por parte de una nación con una innegable tradición de expansión colonialista.
Dicho de otro modo: dado que en Malvinas no hay un pueblo subyugado por un poder colonial, sino un territorio colonizado, es que la Argentina sostiene que en el litigio con Gran Bretaña debe aplicarse el principio de integridad territorial y no el principio de libre determinación. Por otro lado, la aplicación del principio de libre determinación para el caso Malvinas resulta absurdo. Así lo explica Ruda en su alegato ante el III Subcomité de Descolonización:
“En tal sentido, consideramos que el principio de libre determinación sería mal aplicado en situaciones en que parte del territorio de un Estado independiente ha sido separado contra la voluntad de sus habitantes-en virtud de un acto de fuerza por un tercer Estado, como en el caso de las Malvinas, sin que exista ningún acuerdo internacional posterior que convalide esta situación de hecho y cuando, por el contrario, el Estado agraviado ha protestado permanentemente por esta situación. Estas consideraciones se ven agravadas muy en especial cuando la población originaria ha sido desalojada por este acto de fuerza y grupos fluctuantes de nacionales de la potencia ocupante la han reemplazado”.
Finalmente, la Asamblea General de las Naciones Unidas se pronunció, en el año 1965, en torno a la cuestión de las islas Malvinas. Lo hizo a través de la Resolución 2065, que deja traslucir un apoyo al planteo argentino y constituye uno de los más relevantes reconocimientos en el plano internacional acerca de la existencia de un litigio entre Argentina y Gran Bretaña en torno a la cuestión Malvinas. ¿En qué sentido? Básicamente, porque insta a las partes a negociar pero estableciendo que en la mesa de diálogo haya sólo dos partes en disputa: Argentina y Gran Bretaña. Esto supone un rechazo tácito al planteo británico que pretendía que la controversia se dirimiera según el principio de libre determinación ya que, de haber sido tenido en cuenta este principio, la Resolución hubiera tenido que considerar a los isleños como una de las partes en la disputa, punto que explícitamente queda descartado en la Resolución 2065.
En síntesis, la Resolución 2065 constituye hoy la referencia jurídico-diplomática más importante en el plano internacional sobre la cuestión Malvinas, ratificada en más de 40 oportunidades desde 1965 hasta la actualidad. Hoy en día, el Reino Unido incumple esta Resolución al rehusarse a reiniciar las negociaciones por la soberanía de Malvinas y otras islas del Atlántico Sur. Negociaciones que la República Argentina sigue reclamando con un amplísimo apoyo mundial, expresado por MERCOSUR, UNASUR, CELAC, África, el Grupo de los 77 más China, Rusia, entre otros Estados, sin dejar de nombrar a los más de 90 Comités Malvinas conformados en distintos puntos del mundo.
LA GUERRA DE MALVINAS
Cuando hablamos de una guerra, nos estamos refiriendo a una experiencia límite. De todos modos, conviene tener en cuenta que no hay un único modo de comprenderla. La complejidad en las miradas y percepciones se ven reflejadas en el vídeo y en la carta. Por un lado, la voz del Capitán Luis Assar, quien asume su pertenencia institucional, por el otro la del ex combatiente y protagonista del documental Sergio Delgado.
Los invito a observar la película dirigida por Ramiro Longo con el controvertido título "No tan nuestras", especialmente desde el minuto 28:40 al 50:49.
A continuación, lean la carta que les escribió el maestro y soldado voluntario Julio Cao a sus alumnos de 3er grado, de la Escuela 32 de Gregorio de Laferrere (Prov. de Bs. As.), quien moriría días después.
Como verán, esto es apenas un recorte de la enorme heterogeneidad de miradas que pueden citarse sobre la Guerra de Malvinas: la pertenencia institucional por un lado, el temor, el sufrimiento y la esperanza de sobrevivir por el otro y el "deber de un soldado" por último.
A partir de estos recursos audiovisuales respondan:
1.- Identifiquen las tres posturas, den sus características, intenten justificarlas.
2.- Elaboren una propia "memoria de la guerra", a partir de lo que hayan escuchado en casa, en la escuela, en los medios (media carilla).
3.- Revisen las palabras que aportaron en la Nube de Palabras de la primera clase. ¿Está presentes en el relato? ¿Agregarían otras? Justifiquen por qué.
LA GUERRA EN CONTEXTO
Según plantea el Informe Rattenbach (un documento elaborado por una comisión
creada a fines de 1982 para analizar el desempeño de las Fuerzas Armadas durante
la guerra, sobre el cual volveremos hacia el final de la clase), la decisión del
desembarco fue inicialmente tomada por la Junta Militar con el objetivo de forzar al
gobierno británico a negociar. Pero los militares argentinos no previeron ni la
ofensiva militar inglesa ni el apoyo norteamericano al Reino Unido. Hay que
recordar aquí que Margaret Thatcher, Primer Ministro británica, entrevió que un
triunfo militar podía contribuir a saldar la crisis política interna que su gobierno
atravesaba.
POSGUERRA Y "DESMALVINIZACIÓN"
Preguntas disparadoras del debate:
·
¿Qué nos sugiere el afiche?
·
¿Qué sentimientos transmite?
·
Intenten elaborar un diálogo o mensaje que
corresponda a la imagen.
·
¿Se sienten interpelados? ¿Por qué?
·
¿Hay “desmalvinización” actualmente? Den
ejemplos.
El afiche se realizó en el año 1984 por la
Comisión Coordinadora Nacional de
Centro Ex combatientes y que incluye texto del Gral. San Martín y que evoca
idearios políticos de la época.
En síntesis, las primeras reacciones en torno a la guerra de Malvinas oscilaban
entre el ocultamiento militar, la conmoción social y el reconocimiento local a los
soldados, en un contexto político en el que la guerra comenzaba a ser asimilada
como una “aventura militar” llevada a cabo por los militares que habían sido
también los responsables de las desapariciones de miles de argentinos.
El historiador Federico Lorenz se pregunta en uno de sus libros: “¿Qué guerra terminó en las islas Malvinas el 14 de junio de 1982?
¿Qué guerras empezaron ese mismo día?
El fin de la guerra significó, a su vez, el comienzo de nuevas luchas centradas en la búsqueda de reconocimiento social."
¿Cuál es la situación actual de la disputa diplomática?
reclamo por la soberanía ha ganado un mayor impulso, dentro de una estrategia
que a partir del año 2003 tiene cinco ejes fundamentales:
1. Remarcar persistentemente en los organismos multilaterales la necesidad de que
el Reino Unido reanude las negociaciones por la disputa de la soberanía de las Islas
con Argentina, de acuerdo a lo dictaminado por la Organización Naciones Unidas
(ONU) desde 1965 y ratificado permanentemente.
2. Denunciar la depredación por parte del Reino Unido de los recursos naturales
provenientes de la pesca, el turismo y la exploración de hidrocarburos, entre otros.
3. Exigir el cese de la creciente militarización de las Islas. En efecto, mientras que
en 1982 había en la base militar Monte Agradable una dotación militar de 50
efectivos, en la actualidad hay alrededor de 1500, cifra que aumenta en las épocas
del año donde se realizan ejercicios militares específicos, ya que la base sirve como
espacio de formación de las fuerzas armadas británicas. De hecho, Monte Agradable
es la principal base militar británica situada fuera del Reino Unido y es un campo de
prueba de las nuevas tecnologías que desarrolla el complejo armamentista
británico.
La base cuenta con dos pistas de aterrizaje para grandes aviones y helicópteros, un
importante centro de comando y control y una base de inteligencia electrónica que
permite monitorear el tráfico naval y aéreo de la región. Todo esto convierte a la
base de Monte Agradable en la mayor base militar al sur del Paralelo 50°. La
República Argentina ha denunciado el militarismo británico en distintas ocasiones,
entre ellas, ante Naciones Unidas en el año 2012 a causa de la presencia de un
submarino nuclear en la zona y, más recientemente, el incremento de unidades
militares aéreas que anunciaron los británicos en vísperas del 2 de abril de 2015.
Según hipótesis de varios expertos en geopolítica, el gasto que importa el
mantenimiento de esta base militar encuentra su justificación en la relevancia que
adquieren las islas como proyección de la OTAN en el mundo según el nuevo mapa
de conflictos internacionales. Algunos expertos también incluyen entre los motivos
de la presencia militar británica en Malvinas sus pretensiones respecto a la
Antártida.
Los argumentos que sostienen este diagnóstico señalan que la presencia militar
británica en las islas permitiría: (a) impedir cualquier coordinación de acciones en
común entre América del Sur y África; (b) tener amplias perspectivas de control
militar sobre el Atlántico Sur, lo cual es un motivo importante para explicar la
solidaridad de los países suramericanos con la postura argentina; (c) dominar, si se
pone en relación la presencia británica en Malvinas con el dominio de las islas
Ascensión y Santa Helena, el tráfico marítimo que va de Europa a la Antártida y (d)
dominar rutas alternativas para eventuales enfrentamientos de la OTAN con sus
potenciales enemigos políticos y militares.
En síntesis, la presencia británica en el Cono Sur vuelve a ser objeto de justificadas
críticas, sobre todo a partir de las doctrinas bautizadas con el mote de “guerras
preventivas” que tienen amplio asidero en el Atlántico Norte.
4. Instalar la cuestión Malvinas como una reivindicación de la región suramericana,
en sintonía con la importancia que asume América del Sur como instancia
privilegiada para la inserción de la Argentina en la política y economía mundial,
dejando atrás el alineamiento automático con las posturas de los Estados Unidos,
rasgo indeleble de la diplomacia argentina durante los años noventa. En la
actualidad, la postura argentina sobre las islas del Atlántico Sur es apoyada por el
Mercosur, UNASUR y CELAC. También, por países de otros continentes, como África
y el G77 + China.
5. Plantear el reclamo de Malvinas en distintos organismos multilaterales, teniendo
en cuenta que se trata de una disputa territorial dispuesta a atender y respetar,
como sostiene nuestra Constitución Nacional, el modo de vida de los isleños. Como
sostiene Alicia Castro, embajadora argentina en Gran Bretaña: “No tenemos un
conflicto con los habitantes de las islas Malvinas, se trata de una controversia
territorial. La gran mayoría de los habitantes de las islas Malvinas son británicos y
pueden seguir siéndolo si así lo desean, pero el territorio en el que habitan no lo es.
En derecho internacional, no toda comunidad humana establecida en un ámbito
geográfico dado es titular del derecho de libre determinación, sino únicamente los
“pueblos”. Los actuales habitantes de las islas Malvinas no son reconocidos como
un “pueblo” por las Naciones Unidas ni han sido víctimas de una dominación
colonial. Tienen muchos derechos, pero no el de decidir el destino del territorio en
el que habitan. El gobierno del Reino Unido manipula el argumento de la libre
determinación como una estrategia para eludir la obligación que le impone el
derecho internacional de resolver la controversia por vías pacíficas y diplomáticas”.
Malvinas y los recursos naturales
pescadilla azul, almejas, ostras y krill. Desde el año 2005 y de forma unilateral, el
Reino Unido comenzó a otorgar licencias pesqueras, violando la Resolución 31/49
de la ONU que "insta a las dos partes a que se abstengan de adoptar
modificaciones en la situación de las islas". En ese mismo año, el gobierno
argentino decidió suspender la cooperación bilateral acordada en los tratados de
1990. Entre recursos provenientes de la pesca hay que contabilizar las especies que
habitan la superficie marítima ocupada ilegalmente por Inglaterra, que equivale a
veintitrés veces la superficie de las Islas Malvinas. Hoy en día, la pesca representa
una de las principales fuentes de ingreso de los isleños y la venta de licencias de
pesca a terceros, sobre todo a compañías trasnacionales, es uno de los recursos
más rentables.
Lo mismo sucede con los recursos minerales. Las islas poseen nódulos
polimetálicos, importantes para el desarrollo de diferentes industrias. En este
sentido, el Reino Unido es uno de los países que más ha desarrollado la capacidad
de extraer minerales en el fondo del mar.
Los hidrocarburos serían potencialmente los recursos más preciados de las islas
Malvinas. Desde el Informe Shackleton, producto de la investigación que en 1975 el
gobierno británico encargó a la Universidad de Birmingham para determinar la
existencia de petróleo y la riqueza ictícola en la cuenca Malvinas, los británicos
muestran interés en la exploración y explotación de este recurso. El Estado
argentino ha denunciado en las distintas bolsas de comercio mundiales donde
cotizan sus acciones a las empresas que realizan tareas de exploración en Malvinas.
Desde el 2010 el Gobierno argentino impuso restricciones a la navegación hacia las
Malvinas por el Decreto N.º 256/2010 y dispuso sanciones desde 2012/2013 a las
empresas petroleras que exploran en Malvinas, lo que motivó el repudio británico.
Asimismo, otra decisión destacada en este sentido consistió en inhabilitar, en
agosto de 2013, a cuatro empresas petroleras de origen británico (Borders and
Southern Petroleum PLC, Desire Petroleum Public Limited Company, Argos
Resources Ltd. Y Falkland Oil and Gas Limited) para desarrollar actividades
comerciales en el territorio continental argentino por haber realizado actividades en
la plataforma continental argentina cercana a Malvinas sin autorización del Estado.
Y a fines de abril de 2015, se ha iniciado una denuncia penal en el Juzgado Federal
de Río Grande contra las empresas Falkand Oil and Gas Limited (FOGL), Edison
International SPA, Noble Energy Inc. y su filial Noble Energy Falkland Limited,
Premier Oil plc. y Rockhopper Exploration plc, a las que se las acusa de realizar
actividades directas de exploración y explotación. La acusación sin embargo
también incluye la denuncia contra el riesgo ambiental y contrabando de insumos;
y a la vez, se extiende a otras empresas por facilitar la logística y las
investigaciones científicas para la exploración y –según sostiene la denuncia,
también explotación- de hidrocarburos en Malvinas.
Finalmente, además de los recursos pesqueros, mineros e hidrocarburos, otro
factor de ingresos económicos en las islas es el turismo. Según registros
británicos, entre 2008 y 2009 hubo un aumento del 200% de visitantes de las islas
y en 2011 unos 70.000 turistas visitaron las Malvinas.
PERIODISMO DE OPINIÓN
Lean el siguiente artículo periodístico y respondan:
1.- ¿Qué similitudes presentan Malvinas, Gibraltar y Hong Kong como colonias o ex-colonias?
2.- ¿Qué diferencias?
3.- ¿Por qué dice el autor que Gran Bretaña tuvo una actitud "pragmática" en la cuestión Hong Kong?
4.- Qué propone el periodista para intentar "recuperar" la soberanía de las Islas?
5.- ¿Por qué es inadmisible aplicar el principio de "Autodeterminación de los Pueblos" en el caso Malvinas?
Lean este artículo referido a la vida en Malvinas y debatan:
1.- Grado de "dependencia" de los isleños.
2.- Turismo y recepción de argentinos.
3.- Participación de Estado.
4.- Voluntad de cooperación con argentinos
Lean el artículo sobre estrategia soberana y establezcan:
1.- ¿Qué valor estratégico tienen las islas?
2.- ¿Qué estrategia propone el senador nacional Solanas?
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